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domingo, 27 de febrero de 2011

¿Qué está pasando?

Este post viene a colación debido a los acontecimientos a suceder en estos días, así que me pareció conveniente comentar un poco acerca de las nuevas cintas y sus misteriosos orígenes. Como muchos de nosotros hemos oído, se acercan los premios “Oscar” el cual al parecer los medios es el reconocimiento más importante que puede obtener una cinta (claro esto sólo en términos de la industria cinematográfica más rica) y lo que realmente quiero mencionar de esto son las cintas y sus respectivos directores que están nominados a conseguir este aclamado premio. Hace algunos años aun parecía un tanto distante este premio de lo que realmente parecía ser la gama de buenas cintas que aparecían durante todo un año alrededor de todo el mundo ya que si bien las cintas ganadoras eran realmente un verdadero “churro” o simplemente para “dominguear” la mayoría se delimitaba por sus esfuerzos en el gasto de dinero para efectos especiales y contratación de actores de alto renombre para satisfacer los instantes de ansiedad de la gente que no pretende mucho del cine, muy pocas de las veces la cinta ganadora del premio a mejor película era en verdad buena en su historia y dirección, así que para muchos de los aficionados al cine este premio venía siendo un mero suceso sin sentido ni significancia. Sin embargo este año en especial puso en mí cierto interés las nominaciones debido a las cintas seleccionadas y principalmente los directores de estas. Como dato adicional faltaba decir que los directores que normalmente están involucrados en esta industria parecen provenir de cierta jerarquía y realeza que hereda los puestos y cargos de las cintas que van a representar a la empresa de Hollywood, pero en estos últimos años ha acontecido algo bastante inquietante en cuanto a este relevo de directores, ya que muchos de estos nuevos relevos llevan en el negocio tanto tiempo como cantidad de cintas en su filmografía, sin embargo durante este haber en su carrera, el trabajo de estos directores había pasado desapercibido por los empresarios de Hollywood, y de un momento a otro ocurrió el ultraje de todos estos directores hacia esta industria y que a mi parecer ya no era necesario debido a que ya se habían ganado un renombre en el cine independiente y “de arte”; para prueba de esto los actuales premios al oscar. Como muchos sabemos Danny Boyle durante mucho tiempo se dedico al cine independiente (su mejor ejemplo es Trainspotting) generando grandes expectativas y montones de fans, pero sin embargo poco a poco fue incursionando en el ámbito comercial, sus últimas cintas nos demuestran que su esfuerzo ha sido recompensado (si así se le puede decir) y ahora posee ese sitio tan deseado dentro de los directores reconocidos. Otro de los que ha arrebatado montones de buenos comentarios es Christopher Nolan en el medio del cine independiente (creador de memento), ese grandioso director que para muchos la incursión de su trabajo en el medio Hollywodense vino a quitarnos uno de los pocos directores que nos orgullecía que estuvieran apartados de este medio, pero que con su último largometraje “El origen” logró entrar por la puerta grande al “bisnes”. Uno de los directores al que le dieron las posibilidades de hacerlo poco a poco fue David Fincher creador de una cinta increíble (El club de la pelea) y que poco a poco nos mostró que lo único que quería era poseer este puesto en la industria. El siguiente creador de una de mis cintas favoritas (Pi el orden del caos) Darren Aronofsky ha mostrado con su particular punto de vista en el cine que puede crear cintas buenísimas justo para todo tipo de audiencia y que es lo que justo andaba buscando Hollywood.
Lo más curioso de todo esto es que ahora podemos oír en los medios de comunicación como sin sentido empiezan a decir que estos directores son buenísimos y que sus cintas anteriores son increíbles, (aunque en sus rostros se refleja esa ignorancia sobre lo que dicen y que si les preguntara de que tratan sus cintas anteriores se quedarían mudos) nos dan ese sentimiento de robo, de que nos están quitando a nuestros directores, que sabemos que nos los van a echar a perder, un claro ejemplo es como les mencionaba a Danny Boyle y David Fincher, donde si bien sus últimas cintas no son malas, ya no tienen nada que ver con sus ideologías y temas que solían mostrar en sus inicios y que a muchos nos llegaron a hacer sus fans debido a esto, pero por otro lado, al ver las cintas realizadas por Nolan o Aronofsky podemos pensar lo contrario, que ellos por otro lado parece que le van a sacar el máximo provecho a esto y como vimos en “El origen” o “el cisne negro” van a gastar todo el dinero posible en efectos especiales pero justo para llevar a cabo sus ideas más locas y descabelladas que tal vez no podrían realizar teniendo un presupuesto y tecnología común de una cinta independiente, lo que de verdad nos gustaría observar de estas nuevas fusiones entre verdaderos directores y montones de dinero perteneciente a Hollywood. Pero para finalizar ¿Qué es lo que realmente queremos, la posibilidad de ver a nuestros directores favoritos llevando a cabo sus trabajos más soñados y con todos los recursos posibles para que queden como una joya o tener a nuestros directores en un montón de cintas sin un verdadero significado y cayendo a cada paso en el ámbito de lo común o diciéndolo de otra forma echándose a perder en Hollywood?